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Prevención
- Llevar un buen control de la diabetes (HbA1c<7%), dejar de fumar y evitar lesiones en los pies son los primeros pasos que se deben realizar para evitar el pie diabético
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Higiene diaria
- Lavado diario: El lavado diario de los pies con agua tibia y con jabón pH 5.5 es imprescindible. Es importante secar minuciosamente los pies, sin olvidar los espacios entre los dedos. Finalmente, aplicar crema hidratante para evitar las grietas en la piel
- El cuidado de las uñas: No utilizar utensilios punzantes para cortar las uñas. Es mejor limarlas con una lima de cartón o cortarlas con tijeras de punta redonda
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Examinar los pies
- Observe y examine con frecuencia sus pies . No olvide ponerse gafas si las precias y contar con la luz más apropiada. Utilice un espejo para observar la planta del pie
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Visite al podólogo o educador si observa alguno de estos problemas:
- Grietas en los talones o entre los dedos
- Uñeros o zonas enrojecidas
- Ampollas o pequeñas úlceras
- Callos o durezas
- Manchas en las uñas producidas por los hongos
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Vestir adecuadamente los pies
- Medias y calcetines: Evitar medias y calcetines que compriman la circulación de las piernas . Siempre es preferible utilizar calcetines de fibras naturales, ya que permiten una mejor transpiración. Es importante no andar nunca descalzo
- Calzado: La elección del calzado más adecuado permite evitar muchas complicaciones. Se deben comprar los zapatos a última hora de la tarde, que es cuando el pie se hincha y está más distendido. El día en que se estrenan los zapatos se deben llevar poco tiempo y a medida que el zapato se adapta a los pies, llevarlos más horas. Antes de ponerse los zapatos, mire su interior para comprobar que no existe ningún elemento que pueda herir sus pies
- ¿Cómo es el zapato ideal? De piel. Muy transpirable, flexible y blando. Es ancho y no oprime los dedos. No debe tener demasiado tacón. Sin costuras internas que puedan rozar
Autora:
Muntsa Queralt Viñals, enfermera educadora en diabetes. Enero 2006.